sábado, 25 de septiembre de 2010

Violando la última frontera...

¡ Yo no quería follarte
y hacerte una barriga!

¡ Yo no quería exhibirte
paseando de mi brazo!

¡ Yo quería salvarte de ti y de mi mismo,
dotarte de sentido y poesía,
sobrevolar tus piernas,
tu vergüenza, si tenías
y viajar junto a ti, sobre tu escoba!

¡Yo quería, y tú también querías,
que fuésemos distintos
al cien por cien de los mortales!

! No sé en que absurda fase de “lo nuestro”
dejamos de ser 2 para 200,
pero a muy pocos nos gusta desnudarnos tanto!

26/09/10

jueves, 16 de septiembre de 2010

Soneto malvado

Amar? quién solo ama, llora
correr es una excusa contra el viento
creer es la antesala del momento
quedar es redimirse con la boca

Volver es despedirse de lo eterno
anclarse, abandonarse a la deriva
plantar, el estipendio de la vida
quebrarse, vengarse del invierno

Perderse es adentrase en el pasado
por la falsa puerta infiel de la memoria,
arar sobre arrecifes, lo horadado

Dibujar sin los pinceles de la gloria.
Caer es penetrar lo más amado
y a los 15 minutos, ser historia

martes, 14 de septiembre de 2010

CULTURA DEL TODO GRATIS 2

Tres puntos finales: unos puntos suspensivos. La inacción. La suma que termina en cero.

La Historia no se dejó matar tan fácilmente, y huyendo del punto de mira, hizo un corrimiento hacia el magenta dejando tras sí la puerta abierta a una retirada decente del mal tirador Fukuyama. Testaruda, se niega a un sacrificio, por otra parte imposible, porque el hombre para tener un presente necesita un pasado a su forma y semejanza. Los 90 fueron los años en que inventamos un traje a medida para la palabra nihilismo. No sabíamos que significaba, posiblemente tampoco lo tengamos muy claro ahora, pero algo sí sé. Mi generación era nihilista en estado puro. Existían nuestras regla, nuestra ley, las soluciones con nuestro nombre y tres formas de hacer las cosas: por las buenas, por las malas y a nuestra manera. Fue la respuesta a un presente que paradójica y conscientemente quiso asesinar su pasado. La contraparte, fue la idealización. Todo lo nuevo, lo distinto, lo lejano era un fin que alcanzar. Eramos una especie de románticos descreídos, unos anarquistas utópicos y unos revolucionarios vacíos de contenido. Eramos el todo por el todo, sin escafandra, sin armaduras, sin protección, solo con condones.

Entonces la Revolución fue ver la tele. El videoclip mató a la estrella de la radio y transformó la vida en una secuencia de como máximo, tres rápidos minutos. El virus de la desidia colapsó en los despreocupados 90 del "dont' worry, be happy". También fue la tumba definitiva de todas las auténticas Revoluciones. Lo que había sido experimento creativo de libertad, se transformó en repetición y conformismo. La reiteración, el eterno refugio del mediocre, se impuso como ley de vida y modo de subsistencia. Hoy, asimilados ya por el mercado, los videoclips se han vuelto Sagrados Lugares Comunes , con sus cánones e impuestos al valor añadido. Su reino no es de este mundo, es el terreno de las ondas hertzianas de la tele. Y la tele, de mero aparato pasa a modelo, ente vivo, acompañante incondicional. Escuela y templo, ara que sostiene un mundo efervescente, al que se les han quitado las curvitas para ampliar su contenido, y que quepan en él, desde un niño que pudo salvar su vida, y la de su familia desde su trona,

),

hasta un pedo en directo

()

lunes, 13 de septiembre de 2010

CULTURA DEL TODO GRATIS

Si veinticinco años atrás un extraño me hubiese abordado por la calle, diciéndome que viene del futuro y, sacando un iPad (seguramente traería alguno), me contase como iba a estar el patio en el 2010, no le hubiese creído. Eso lo primero. Después le habría denunciado porque las cosas que me estaría contando sería de locos. Hacen ya 9 años el mundo se conmovió y no se ha vuelto a recuperar después del primer ataque a EEUU en su propio suelo. Cayeron las Torres Gemelas. 9 años antes, caía el muro de BERLÍN, y los países del Pacto de Varsovia no movieron ni un solo tanque para salvar al bloque del Este o a la ex-URSS. Y hace unos pocos días, Fidel les dio a algunos una satisfacción y a otros muchos un disgusto afirmando, o simplemente exponiendo, que el modelo cubano no era una franquicia, no era exportable, que cada uno debe tener su propio sello.


No es de extrañar que haciendo un recuento de estos últimos años, lo que tenemos treintaytantos y ya empezamos a teñir canas hemos sido testigos históricos de excepción de acontecimientos hasta hace poco increíbles. Para nuestros abuelos fueron la resaca de los alegres años 20, la Primera y la Segunda Guerra Mundial. Para nuestros padres, pisar la Luna y los viajes lisérgicos y psiconeumáticos del LSD y la marihuana, la Revolución Cubana y las Guerras de Liberación de los 60, la Primavera de Praga y el Mayo del 68. Y sin embargo el mundo tenía un sentido maniqueamente oscilante entre lo bueno y lo malo, y la revolución era pasar de un extremo estable a otro extremo igualmente estable. Después de la semilla que sembrara Einstein con su famoso: Todo es relativo, llegó la hecatombe. Los slogan tardan tiempo en establecerse como axiomas de indudable fe. A las puertas del Siglo XXI y con la tentativa de matar la Historia, la moda era planteárselo todo como un conjunto de absolutos relativos, si se me permite la paradójica expresión. Todo valía lo mismo como tesis que como argumento. A un mundo estructurado y claro, aburrido y falto de motivaciones, se contraponía otro abierto, descarado, inconscientemente, desvirgado tras cada pregunta, con cada respuesta. Un mundo, punto y seguido, y no punto y final. Jódete, Fukuyama.

miércoles, 21 de julio de 2010

El hombre y la hembra. (fragmento)

En 1991, caminando por una carretera de Managua; no en Nicaragua, sino en su homónima de las afueras de la Habana; bajo un techo de ramas que tupía la luz del Sol, dejaba atrás la Unidad Militar en que pasé aquellos 2 terribles años de servicio a la patria. Sí, servicio a la patria en minúsculas, también por dos razones:

1. A pesar del incesante estado de guerra, para mí el Servicio Militar se resumió en aprender a tocar guitarra, cantar, fugarme y pelearme con otros reclutas. Aprendí que un "5 pa' 1" era elegir no solo entre la vida y la muerte (alguna vez tuve que empuñar una mocha para repeler un ataque), sino entre perder la dignidad y el respeto, eso que genéricamente llaman "perder la hombría".

- Mañana me toca guardia...
- Eso no es problema... vamo' a agitar a Fulano de tal pa' que sea tu "criado". (Criado: esclavo, siervo)
- No, a Fulano no, que ese si que se faja..!
- Bueno entonces a esperancejo, que es un poco "cherna", no? (Cherna: Maricón)

El único servicio que yo presté y que me prestó la patria fue, que no me pillaran los "boinasrojas", y que mi jefe después de estar desaparecido con una baja tan larga como los dos años que estuve allí, me dijese. Soldado Fulano de tal, firme su baja aquí.

y, 2. La dieta. La dieta de cuerpo de mujer. En aquel antro de masturbación y sodomía, donde las mujeres más cercanas eran el batallón femenino del campamento cercano; en una proporción de 20 a una, la carencia de esa esencia maravillosa de un cuerpo casi traslucido envuelto en sábanas, de ese pie colgando furtivo al borde del colchón, de los senos hirsutos tentando a cada paso. Eso no se lo puedo perdonar al servicio a la patria porque; al fin y al cabo, los golpes se curan, seolvidan, pasan pero ¿quién me devuelve el tiempo perdido lejos de la hembra?

jueves, 13 de mayo de 2010

En Blanco y Negro

No quiero culparme por la locura ajena, por el dolor ajeno. Soy de nadie y soy yo mismo. No quiero disculparme por la mentira ajena, ni por la propia, ni por la que dije en el pasado. No cargo más la loza de mi historia. Perdónenme; no me bajo, ni del tren, ni del caballo. No he sido el tío más comprensivo, ni aspiro; sinceramente, a serlo. Mi dirección está aquí y mi buzón. Las quejas; a la mar, por favor.

viernes, 16 de abril de 2010

Un mundo felíz

A Aldous Huxley que era tremendo maricón.


Pasemos página. Es hora.

Escribamos el fin de la historia

en el dorso del folio,

en las hojas caídas.


Acabemos de una vez por todas.

Cerremos el sobre y enviemos la sin postal remitente

Pulsemos el coche cuesta abajo

y sin freno de mano,

camino hacia el abismo

y permitamos que caiga al seno del vacio.


Tapemos la botella sin mensaje

lancémosla al mar,

que nunca vuelva, y se pierda


QUEMEMOS LOS MANUSCRITOS

y salgamos sin rumbo al mundo.

Extendamos las extremidades

sin un porqué,

bebamos soma, mezcalt, peyotl,

brindemos por las personas curvas

-como decía el poeta en youtube-

y alejémonos de ellas, de las rectas.

Huyamos de Gaudí y de las ramblas

de las calles equidistantes de La Habana

y de Carabanchel.

Atormentémonos menos, follemos más,

a fin de cuentas

el año acaba o comienza el 31 de diciembre

a las 23:59 o a las 3 de la mañana.

Veamos las puertas como estancos cerrados

sin tabaco, ni papel de liar.

Acabemos de prisa la copa sonriendo

y larguemos.

La vida son 3 meses o dos días.


20 de abril 2010


lunes, 18 de enero de 2010

Lunes

La dicha es encontrar lo inesperado a la vuelta de un sueño, al doblar una esquina, tras el cambio de la luz de un semáforo, o cuando se apaga el neón al amanecer. La dicha puede ser una palabra, un cambio de rumbo, el aguacero cuando escampa y sube el vapor del asfalto y te acaricia las piernas. Puede ser un campo recién arado, la luna detrás de las nubes, el sol tragado por el horizonte en una tarde invernal. La dicha puede ser el silencio o el ruido, la guerra y luego la paz, el aire inmortal que te invade poro a poro, o el ahogo tras el sexo. La dicha puede ser una lágrima o el llanto contenido, el pecho lleno de palomas aleteando cuando ves un niño, el dolor convirtiéndose en cenizas, y tú y yo a solas un domingo.

sábado, 16 de enero de 2010

Haití

¿Donde estaba yo, cuando en Haití tembló la tierra, sepultó la vida, y ni el vudú impidió la catastrofe?


Donde estaba Madrid (volcado en la desmemoria, en las rebajas, en el mundo del consumo hedonista) cuando la Tierra se cobró el tributo de la vida de Jean Francois, Nicole, Toussaint?


Donde estaba Washington hace tan solo un año, cuando el suelo temblaba leve, y sin embargo morían mujeres y hombres, y perros y niños, y moría hasta la memoria desde tiempo inmemorial; morían de sed y de hambre y de ilusiones destrozadas y de sueños rotos y de desgobierno y de hastio, en Haití?

viernes, 8 de enero de 2010

El sofá esta abierto. Una sábana cubre su cuerpo. Está desnuda y casi me da un vuelco el corazón cuando su pierna sale del edredón y se posa encima de la mía. Tiene los ojos como almendras y lee un pasaje del Cantar de los Cantares, un pasaje que habla de sus senos de miel, mejillas sonrosadas; ave mía. La tele dejaba un destello que salta de sus pupilas a mis ojos y su boca; entreabierta como un torrente de agua rompiendo contra las piedras, a mi boca. Parece estar rezando, en inglés, un padrenuestro. Y habla con palabras de Salomón, soplándome al oído besos, versos y palomas.

lunes, 4 de enero de 2010

Fábula vegetal

Vamos a ver como te lo cuento...
Era por año nuevo o fechas cercanas, cuando descubrí que en el patio de mi casa había nacido una pequeña rama adosada al muro. Al principio, pensé en arrancarla, pero por lástima, o por indecisión, la dejé ahí, para que el frío de enero la secara. A mitad de mes la planta seguía ahi, con sus dos ramitas y unas minúsculas hojas asomando por las retículas, pero del mismo tamaño y con la misma fuerza. El frío no había hecho mella, ni en ella, ni en su vigor. Sin embargo las raices habían comenzado a crecer, y la humedad rodeaba en cerco, todo el recorrido de las mismas por la pared. Dos meses más tarde comenzaron las primeras grietas. En la pared apareció, primero como un hilo, luego como una marca y más tarde como toda una profunda cavidad, la grieta que se convirtió en más, y más grande, ramificándose en intrincados recorridos, amenazando con derribar la pared... Amenazando porque la misma red de raices, servía de sostén al débil muro. La pequeña rama, seguía siendo, del mismo diminuto tamaño que el día en que la descubrí adosada a la pared. Sus ramas, indefensas y raquíticas; pero su base, cada vez mayor y más profundas. Al princicio tuve la idea de arrancarla de cuajo. Pero eso significaría que media pared iba a dar con sus escombros al suelo. ¿Debería reconstruir luego, o dejar el hueco como testimonio de mi abandono? Ya sé, revocaría la pared, sepultando las raices y la minuscyula plantita. Pero tenía el extraño presentimiento de que volvería a salir, y en mi imaginación desbordada, que renacería, no con más vigor, sino con más rabia y terminaría por engullir mi casa. Aprendería a vivir con ella, apesar de que paso a paso, se va haciendo dueña de toda la casa. Estamos a mitad de abril, y me siento a la sombra de sus raices que me cubren del fresco viento primaveral, a la vez que veo aumentar su poder sobre mi y las paredes de la casa...

Moraleja:

1. No te fíes de lo que parezca debíl, si no sabes hasta donde alcanzan sus raices.
2. La confianza es como el agua que se filtra en una cueva; deja restos de los que puedes arrepentirte en el futuro.
3. Si la vida te da limones, te da limones. Tú decides si son para hacer una buena limonada, condimentar tus alimentos o recibir un empacho de vitamina C, pero asúmelo: la vida te da limones...